A algunos les parecen bestiales, a otros feas, para otros tienen la elegancia de la utilidad... todo es opinable. Lo que no es opinable es que las botas Doctor Martens son una botas que irradian personalidad por donde quiera que pisan.
Nacidas de la cabeza de un doctor militar, el alemán Klauss Märtens, el cual, tras lesionarse un tobillo esquiando se dio cuenta de que las botas militares alemanes no eran del todo cómodas en especial si te dolían los pies. Se le ocurrió diseñar una suela con aire en su materia que les dieran capacidad de amortiguación. Con eso, y un poco de cuero logrado en un saqueo (terminaba por entonces la II Guerra Mundial y Alemania era un ¡sálvese quien pueda!) confeccionó un primer prototipo que disfrutó el mismo.
Logotipo de Dr Martens
Lo cierto es que Märtens y su socio de la postguerra Funck lograron reunir algo de dinero y empezaron a fabricar un nuevo tipo de botas con suela acolchada y fuertes costuras que empezaron a hacerse muy populares entre aquellos alemanes que trabajaban muchas horas de pie. En 1959 decidieron dar un salto al exterior y la empresa británica de zapatos R. Griggs Group Ltd. logró los derechos para fabricarlas y comercializarlas en Reino Unido. Justo a tiempo para explosión de la música británica. En poco tiempo, las ya Martens se convirtieron en un símbolo juvenil, tanto de Skin Heads como punks, pero también de altos ejecutivos que las usan tanto en cacerías como paseando en la calle con vestimenta informal y que gustan de la comodidad de su suela y de la fuerza de su puntera de acero.
El actor Johnny Deep de traje, calzando unas Dr Martens. A su lado, Christopher Lee con zapato clásico.
Suela de una Doctor Martens
Existen imitaciones de nombre parecido pero obviamente son solo eso y no pisan como pisan unas auténticas Dr Martens.
No hay comentarios:
Publicar un comentario